Palabras de Aliento para Mujeres

Aun cuando hay muchos recursos sobre cómo leer y estudiar la Escritura, muy pocos se enfocan exclusivamente en cómo hacerlo por primera vez. Esto es lo que Smethurst entrega en este «preludio» único para abrir tu Biblia. Pues sin la correcta postura del corazón, no estamos listos para comenzar a leer. Although there are many great resources on how to read and study Scripture, hardly any focus exclusively on how to approach it in the first place. That's what Smethurst provides in this unique "prelude" to opening your Bible. For without the right heart postures, we're not yet ready to...

En una sociedad donde predomina la ciencia y la técnica, hay un fuerte crecimiento del pensamiento supersticioso. El alejamiento de la Verdad leva al hombre a buscar responder a sus preocupaciones eternas. En este libro, el autor Francisco Marques hace una reflexión sobre la existencia de la superstición en nuestras vidas, ayudando el lector a individualizar y a alejarse de todo lo que es peligroso para su vida espiritual, y propone un camino de crecimiento y transición a la verdadera Devoción, que da acceso a la verdadera paz, libertad y felicidad. Se abordan temas como: La Religiosidad ...

El autor, erudito, se declara enamorado del último libro de la Biblia, de su lenguaje literal y figurativo. Profesor de escatología durante varios años, está especializado en el estudio e interpretación del Apocalipsis, dando una explicación pretribulacionista a la profecía.

Es un gran honor para nuestra Iglesia contar con una interminable lista de mártires que, en distintos lugares y tiempos, sellaron con su sangre el seguimiento a Jesucristo y a la defensa de su fe. En el libro del Apocalipsis observamos que los describe como "el ejército de los triunfadores", que acompañan al mayor mártir del mundo, Jesús. Muchos han sido reconocidos oficialmente y están en los altares, porque la Iglesia los nombró santos. Otros han quedado como olvidados, en el anonimato. Por eso, el Papa Juan Pablo II se interesó para que las iglesias locales no perdieran la memoria...