Me Siento Preocupada

Brian Moses es un destacado poeta y autor infantil británico, conocido por su habilidad para conectar con los jóvenes lectores a través de sus versos ingeniosos y accesibles. Nacido en 1950 en Southampton, Inglaterra, Moses ha dedicado gran parte de su vida a la poesía y a la literatura infantil, creando un legado significativo en este campo.

Desde muy joven, Brian mostró un interés especial por las palabras y la escritura. Se educó en una variedad de escuelas en su ciudad natal y, tras finalizar sus estudios, se embarcó en una carrera que inicialmente lo llevó a trabajar en diversas áreas, incluyendo la enseñanza y el periodismo. Sin embargo, su pasión por la poesía lo impulsó a convertirse en escritor a tiempo completo, dedicándose a crear obras que inspiraran a las generaciones más jóvenes.

Uno de los aspectos más notables de la obra de Moses es su capacidad para abordar temas que resuenan con los niños, desde las pequeñas preocupaciones cotidianas hasta la exploración de la imaginación y la creatividad. Su estilo sencillo y claro, combinado con un toque de humor, hace que sus poemas sean accesibles y atractivos para los más jóvenes. A menudo, su trabajo incluye elementos de rima y repetición, lo que no solo lo hace divertido de leer, sino también fácil de recordar.

• Publicaciones: A lo largo de su carrera, Brian ha publicado más de 30 libros de poesía y literatura infantil, lo que le ha valido el reconocimiento en el ámbito literario. Algunos de sus títulos más populares incluyen "The Best Birthday Present Ever", "The Dinosaur that Pooped a Planet", y "Chocolate Cake".
• Premios: Su contribución a la literatura infantil ha sido reconocida con varios premios y distinciones a lo largo de los años, consolidándolo como una figura influyente en el campo.
• Apreciación: Los docentes y educadores aprecian su trabajo no solo por su atractivo, sino también por su capacidad para fomentar el amor por la lectura y la escritura entre los jóvenes. Muchos de sus poemas se utilizan en escuelas de todo el Reino Unido y más allá.

Además de su labor como escritor, Brian Moses es un orador entusiasta y un defensor de la poesía en la educación. Se ha presentado en numerosas escuelas y festivales literarios, donde ha compartido su amor por la poesía e inspirado a niños y adultos por igual. Su enfoque en la interacción y la participación del público durante sus lecturas ha hecho que sus presentaciones sean memorables y educativas.

En resumen, la trayectoria de Brian Moses es un testimonio de su dedicación a la literatura infantil y su habilidad para conectar con los jóvenes a través de la poesía. Su trabajo no solo ha entretenido a innumerables niños, sino que también ha dejado una marca duradera en el mundo de la literatura. Con cada libro y cada poema, continúa inspirando a nuevas generaciones a explorar la belleza y la alegría de las palabras.

Explains the importance of good manners and describes ways to show politeness in the home, school, and community.

An elephant suddenly finds himself burrowed inside the den of a leopard. Terrified, he asks for help. The leopard, following an absurd logic, teaches him how to escape from the den. Then, to the leopard's horror, he finds himself immersed in the deep sea. Here begins the chain of unexpected and desperate situations where we find many animals acting as "fish out of water." The animals continually help one another in these unfamiliar environments by applying common sense. An illustrated story with artistic collages, this book features color in a vivid new way.

Socially inept but pure of heart Keiichi accidentally dials the Goddess Technical Help Line and wishes for the charming, and divine, Belldandy to stay with him forever, but college life just isn't the same once you are living with a Goddess.

Cristóforo, a sixteen-year-old cabin boy, narrates his love for a girl, and his dream trip by land to Florence in search of a map that eventually will take him to the New World.

Ocurrió en el zoológico un día soleado, que papá llevó a Tete a un paseo de sábado. Al poco andar le pareció algo extraño que, en un zoológico de semejante tamaño, no había elefantes, no había gorilas, no estaban las focas nadando en filas, no había monos, no había culebras, no había jirafas, ni llamas, ni cebras. Entonces Tete dedujo, con escalofrío, que el zoológico, quizás, estaba vacío.