Nellie Bly, nacida como Elizabeth Cochran el 5 de mayo de 1864 en Cochran's Mills, Pensilvania, es conocida por ser una pionera del periodismo de investigación y una figura emblemática en la lucha por los derechos de las mujeres. Bly se destacó por su audaz enfoque en la cobertura de temas sociales y su capacidad para desafiar las convenciones de su tiempo.
Desde joven, Nellie mostró un interés por la escritura, pero tuvo que enfrentar las limitaciones que la sociedad de su época imponía a las mujeres. A pesar de estas dificultades, Bly se convirtió en escritora para el periódico Pittsburgh Dispatch en 1885. Adoptando el seudónimo de "Nellie Bly", se hizo conocida por sus artículos que trataban temas de interés femenino y social.
Uno de sus trabajos más notables fue su investigación sobre la vida de las mujeres en fábricas, donde narró las terribles condiciones laborales a las que estaban sometidas. Sin embargo, su mayor hazaña llegó en 1887, cuando se infiltró en el asilo para mujeres de la isla Blackwell en Nueva York. Su investigación destapó el abuso y la negligencia que sufrían las pacientes y llevó a reformas significativas en el sistema de salud mental. Su serie de artículos, titulada Ten Days in a Mad-House, recibió aclamación por su valiente denuncia de los abusos en estos instituciones.
Inspirada por su éxito, Bly decidió hacer un gran viaje alrededor del mundo en 1889, con la intención de superar el récord de Phileas Fogg, el personaje ficticio de la novela de Julio Verne La vuelta al mundo en ochenta días. Conociendo los desafíos que esto implicaría, Bly partió de Nueva York y, tras una travesía llena de aventuras y contratiempos, regresó a la ciudad en solo 72 días, 6 horas y 11 minutos, convirtiéndose en una celebridad en Estados Unidos.
A lo largo de su carrera, Bly continuó abordando temas cruciales, como la corrupción gubernamental, la condición de los trabajadores y los derechos de las mujeres. También realizó un significativo trabajo en el ámbito del periodismo de guerra durante la Primera Guerra Mundial, cubriendo el conflicto en Europa y haciendo un llamado a la atención sobre la situación de las mujeres en tiempos de guerra.
Además de su trabajo como periodista, Nellie Bly también fue una defensora de los derechos de las mujeres y abogó por el sufragio femenino. A través de su escritura, buscaba concienciar y generar cambios en una sociedad que a menudo relegaba a las mujeres a un segundo plano. Sus esfuerzos contribuyeron a abrir puertas para futuras generaciones de mujeres en el periodismo y otros campos.
En su vida personal, Bly estuvo casada con el millonario Robert Seaman en 1895, aunque la unión fue tumultuosa y terminó en su fallecimiento. Tras su muerte, Bly heredó una considerable fortuna y continuó escribiendo, aunque su enfoque en el periodismo cambió con el tiempo. En sus últimos años, se dedicó a trabajar en varias publicaciones y a seguir contribuyendo al desarrollo del periodismo en América.
Nellie Bly falleció el 27 de enero de 1922 a los 57 años en Nueva York. Su legado perdura en la historia del periodismo, donde se la recuerda como una figura que rompió barreras, defendió la verdad y luchó por los derechos de los más vulnerables. Su vida y obra siguen inspirando a muchos, demostrando que el periodismo puede ser una poderosa herramienta para el cambio social.
A lo largo de su carrera, Nellie Bly estableció un estándar para el periodismo de investigación, mostrando que la valentía y la dedicación son esenciales para informar al público y promover la justicia. Su impacto en la historia del periodismo, así como en la lucha por los derechos de las mujeres, resuena aún en la actualidad.