Hna. Amelia Lpez Fernndez Bastida

Es una historia real dirigida a mujeres, madres y jóvenes, ayudandolas a verse a través del espejo de Dios. Describe la desesperación que las mujeres, jóvenes y niñas experimentan cuando permiten que el mundo sea quien las defina. Presenta 5 mentiras que el mundo se ha encargado de sembrar en las mentes de las mujeres y las 5 verdades que ayudarán a desechar esas mentiras. Cuando la mujer se aparta de los espejos del mundo y se mira en el espejo de la Palabra, su belleza, propósito e identidad se hacen reales.

El matrimonio es una escuela de amor: a Dios, al cónyuge, a los hijos por amor a Dios y a todo lo que nos rodea. A esa escuela se entra a través del sacramento, y para recibirlo hay que estar preparados. Estas páginas contribuyen a asimilar profundamente la doctrina del matrimonio y son muy indicadas tanto para las parejas como para los sacerdotes que preparan a los novios para recibirlo.

"¿Cuáles son los límites de la percepción? ¿Lo que percibes es lo que, realmente, existe? ¿En qué punto convergen la realidad y la imaginación? ¿Sabías que el cerebro procesa la información sensorial de forma conjunta, de tal manera que lo que percibes por uno de tus sentidos puede afectar significativamente los procesos de los otros? Estas son algunas de las preguntas que vamos a indagar a través de los capítulos de este libro, el cual no solo contiene información que te hará repensar la manera en la que percibes y sientes cada estímulo, sino que te dará las herramientas...

«No vale el mundo entero el día en que el 'Cantar de los cantares' fue dado a Israel». Tal es la valoración del rabí Aqiba sobre 'Šîr ha-šîrîm', el cantar más bello, la colección más hermosa de canciones de amor de la literatura universal, uno de los libros más breves y a la vez más sugerentes de la cultura literaria de la Antigüedad. Un libro que entró en los cánones judío y cristiano gracias a la interpretación alegórica (describiría las relaciones de Adonay con Israel, de Cristo con la Iglesia o con el alma), pero cuyos versos, aún en el siglo I d.C., se cantaban en...