Guillermo Vilas. El número uno

«Se me romperá el corazón y nadie sabrá nunca cuánto sufrí por la libertad de España». Estas palabras de Manuel Azaña (Alcalá de Henares, 1880-Montauban, 1940), reflejan la pasión por los ideales democráticos de una de las figuras políticas e intelectuales más importantes del siglo XX español. Nacido en una familia liberal y burguesa, abogado, funcionario y escritor, Azaña se convirtió en ministro y en Jefe del Gobierno de la República durante el bienio (1931-1933) y tras la victoria del Frente Popular (febrero de 1936). En mayo del mismo año fue elegido presidente de la...

Se trata del relato autobiográfico de un hombre nacido a finales de la década de los sesenta, que creció en la cultura y costumbres de la época en Colombia. Educado bajo el esquema de la severidad y la inflexibilidad. Sin embargo, tras haber cometido yerros, celebrar éxitos y llorar fracasos, reconoce el valor de su sensatez y haber encontrado en su edad adulta, los secretos que guardaron esas vivencias. De su familia resalta cualidades, errores y silencios, los cuales determinaron la causa para reorientar su vida y encontrar otro renacer. A través de Memorias de una vida Inconclusa...

Cartas al general Melo: guerra, política y sociedad en la Nueva Granada, 1854, transcribe más de doscientas noventa cartas que diversas personalidades le enviaron el general José María Melo o a uno de sus seguidores durante el tiempo que dominaron el centro del país, en entre mediados de abril y finales de noviembre de 1854. Estas misivas nos abren una ventana al interior del grupo que apoyó el golpe de Estado, evidenciando los conflictos y pugnas que tenían y de paso cuestionando esa visión homogénea con que se ha visto hasta ahora al melismo. Las cartas vienen acompañadas de un...

El 19 de junio de 1867 murieron fusilados en el Cerro de las Campanas de Querétaro, el Emperador Maximiliano I de México y sus leales generales Miguel Miramón y Tomás Mejía. Tras esto se inició un largo proceso para repatriar desde México a Austria tanto el cadáver de Maximiliano como los restos dispersos de su derrotado ejército. Para ello, el Emperador Francisco José I de Austria, hermano de Maximiliano, envió a México a su vicealmirante Wilhelm von Tegetthoff, junto con las fragatas Novara y Elisabeth. Finalmente, tras múltiples vicisitudes y contratiempos, el cadáver del...