Lesbiana: un sueño hecho realidad
Mía amaba su trabajo. Escribir una columna de consejos para personas con problemas sexuales era una tarea hecha especialmente para ella. Tenía un título en terapia y una extraña habilidad para ponerse en los zapatos de otras personas. Todos los días, su bandeja de entrada la recibía con un nuevo desafío. El lunes por la mañana no fue una excepción. Mía leyó el correo electrónico segundos después de arrastrarse fuera de la cama. Todavía no había tomado su café, pero el contenido explosivo del correo electrónico la despertó por completo.