Lewis Carroll, cuyo nombre verdadero era Charles Lutwidge Dodgson, nació el 27 de enero de 1832 en Daresbury, Cheshire, Inglaterra. Fue un destacado escritor, matemático, fotógrafo y lógico, conocido principalmente por sus obras Alicia en el país de las maravillas y Alicia a través del espejo. Estas obras no solo han dejado una huella imborrable en la literatura infantil, sino que también han influido en el desarrollo de la literatura de fantasía en general.
Carroll fue el mayor de los once hijos de un clérigo anglicano, lo que le proporcionó un entorno familiar que fomentaba la educación y la creatividad. Desde joven mostró un interés notable por las letras y la lógica. Estudió en el Christ Church, Oxford, donde se graduó con honores en Matemáticas en 1854. Posteriormente, se convirtió en profesor de matemáticas en la misma institución, donde continuó trabajando durante muchos años.
La pasión de Carroll por las matemáticas nunca eclipsó su amor por contar historias. Durante un paseo en barco en 1862 con la hija de un amigo, la joven Alice Liddell, Carroll comenzó a relatar una historia fantástica que más tarde se transformaría en Alicia en el país de las maravillas. La obra fue publicada en 1865 y su éxito inmediato consolidó a Carroll como un autor de renombre. La narrativa, llena de personajes excéntricos y lógica surrealista, se convirtió en un clásico de la literatura, apreciado tanto por niños como por adultos.
En 1871, Carroll publicó la secuela, Alicia a través del espejo, que continuó la historia de la joven Alicia en un mundo nuevo y aún más surrealista. Este libro es famoso por sus juegos de palabras, sus acertijos y su profunda exploración de la identidad y la lógica. Las obras de Carroll se caracterizan por la mezcla de la realidad con lo absurdo, lo que les ha otorgado un lugar especial en la historia de la literatura.
A lo largo de su vida, Carroll también se destacó como fotógrafo y documentó su pasión a través de retratos de niños, paisajes y otros temas. Sin embargo, su interés por la fotografía fue objeto de controversia debido a su relación cercana con varias niñas jóvenes, lo que ha llevado a especulaciones sobre su vida personal y su carácter. Aunque no existen pruebas concluyentes sobre ningún comportamiento inapropiado, este aspecto de su vida ha sido objeto de análisis y debate en la crítica literaria.
Carroll también escribió varios ensayos y libros sobre lógica y matemáticas, como Euclid and his Modern successors y The Mathematical Papers of Lewis Carroll. Su habilidad para explicaciones complejas de una manera accesible lo hizo popular entre sus estudiantes y colegas. Además, su interés por el lenguaje y la palabra lo llevó a crear juegos de palabras y poemas que aún son estudiados y disfrutados hoy.
El legado de Carroll perdura no solo a través de sus obras literarias, sino también en la cultura popular. Sus personajes, como el Sombrerero Loco y la Reina de Corazones, han sido adaptados en numerosas películas, obras de teatro y otras formas de arte. Las historias de Alicia han inspirado a generaciones de autores y artistas, y su influencia se puede ver en la literatura fantástica contemporánea.
Lewis Carroll falleció el 14 de enero de 1898, pero su legado ha perdurado a través de las generaciones. Su habilidad para capturar la imaginación y su talento para jugar con el lenguaje continúan resonando en la actualidad. La dualidad de su vida como matemático y narrador de cuentos se refleja en la complejidad y belleza de sus obras, que siguen siendo leídas y amadas en todo el mundo.
Hoy en día, el impacto de Carroll se siente en la literatura, la cultura pop y el estudio académico. Su capacidad para trascender los límites de la lógica y la realidad lo establece como uno de los escritores más innovadores y encantadores de la literatura británica.