Por una deuda (Trilogía Contrabandistas 2)

Frank tiene la misión de proteger a toda costa a Tania. ¿Podrán abstraerse de sus sentimientos y centrarse en la misión? El agente Frank se fue sin dejar rastro cuando los hombres de Korpanov acabaron con su prometida. Ahora, cinco años después, sus superiores lo han encontrado en Praga y le ofrecen regresar al servicio activo. Su misión: proteger a Tania, la agente que han infiltrado en la familia rusa y conducirla a Milán para testificar. El viaje estará lleno de peligros, sobresaltos y una irresistible atracción entre ambos que obstaculizará aún más su cometido. Una vez que...

En Lugones resuenan los ecos de la poesía rubendariana; en su obra se evidencian los nuevos rumbos que el poeta nicargüense iluminara para la creación literaria universal.. En 1910, rinde homenaje a la Patria con las Odas Seculares, entre las cuales se incluye la Oda a los ganados y las mieses. En esas composiciones –dice Ara-, "se reconocen huellas helénicas y de Virgilio; pero también voces americanas ya clásicas: Andrés Bello y Manuel de Lavardén, pero la elaboración de los motivos, la riqueza verbal, la emoción propiciatoria y la dignidad de la estructura cíclica son virtudes ...

Un homenaje a las librerías, a los libros y a todos aquellos que los aman. Una lectura para recrearse y saborear con un buen té japonés. Una de las novelas japonesas traducida a más idiomas en los últimos años Best seller del Times en Reino Unido Libro favorito de las librerías independientes en Estados Unidos La epopeya de Rintaro, el joven heredero de una entrañable librería de viejo, y de Tora, un sabio e ingenioso gato atigrado, se ha convertido en un fulgurante éxito internacional. Su emocionante misión consiste nada más y nada menos que en salvar los libros que están en...

Ver Videotrailer Este libro está basado en hechos reales e históricos y recuerdos vividos durante la época de mi niñez en la Hacienda de Bucalemu. En él se relata la historia de la Hacienda y sus diferentes etapas a través de cuatrocientos años, habiendo pasado por las manos de conquistadores, sacerdotes jesuitas, políticos, empresarios latifundistas como mi bisabuelo, don Claudio Vicuña Guerrero y sus descendientes, y por último, el Estado chileno con su Ejército, a cargo tan solo de La Casona y el parque.

Mediante una recargada ornamentación y una extravagante dramatización de las más variadas formas de transgresión (incesto, violación…), que prometían peligros inminentes, luego desplazados o incumplidos, lograba captar la atención del lector.