Francis Scott Key Fitzgerald, conocido como F. Scott Fitzgerald, nació el 24 de septiembre de 1896 en St. Paul, Minnesota. Es considerado uno de los escritores más importantes de la literatura estadounidense del siglo XX, y su obra es emblemática de la era del jazz y de los locos años veinte. La forma en que retrató la vida y las aspiraciones de la alta sociedad estadounidense ha influido en generaciones de escritores y sigue siendo relevante hoy en día.
Fitzgerald era el hijo de un fabricante de productos alimenticios y una madre que provenía de una familia acomodada. A pesar de su infancia relativamente privilegiada, sus padres se separaron en 1908 y esto tuvo un impacto significativo en su vida. En 1913, Fitzgerald se inscribió en la Universidad de Princeton, donde rápidamente se destacó como escritor. Sin embargo, su deseo de ser parte de la élite social lo llevó a abandonar la universidad en 1917 para unirse al ejército durante la Primera Guerra Mundial.
Después de la guerra, Fitzgerald se trasladó a Nueva York para perseguir su sueño de convertirse en un autor reconocido. Su primera novela, This Side of Paradise, publicada en 1920, fue un gran éxito y lo catapultó a la fama. La obra exploró las experiencias de la juventud y el desencanto en la búsqueda de la felicidad, y fue el primer libro que capturó el espíritu de su generación. Este éxito inicial le permitió mantener un estilo de vida lujoso y le abrió las puertas a los círculos sociales de la élite neoyorquina.
En 1920, Fitzgerald se casó con Zelda Sayre, una joven de una familia adinerada que se convirtió en su musa e influencia fundamental en su obra. Sin embargo, su relación estuvo marcada por luchas personales, celos y desafíos financieros. Durante este período, Fitzgerald escribió algunas de sus obras más inolvidables, incluida The Great Gatsby, publicada en 1925. Esta novela, considerada su obra maestra, subraya la decadencia de la alta sociedad estadounidense durante la década de 1920 y crítica el ideal del sueño americano. A través de la vida de Jay Gatsby, Fitzgerald explora temas de amor, ambición y la búsqueda interminable de la felicidad.
A lo largo de la década de 1920, Fitzgerald se convirtió en un ícono cultural, conocido por sus fiestas extravagantes y su estilo de vida deslumbrante, que también se vio marcado por la inestabilidad financiera y el alcoholismo. Sin embargo, a pesar de su éxito, sus obras no alcanzaron la aclamación crítica que merecían durante su vida. La publicación de Tender Is the Night en 1934, aunque aclamada por algunos, no logró replicar el éxito de The Great Gatsby, y Fitzgerald enfrentó un creciente estrés emocional y problemas de salud.
A medida que se acercaba a la década de 1930, la vida de Fitzgerald se desmoronó. Su matrimonio con Zelda se volvió cada vez más tumultuoso, y ella fue internada en un sanatorio debido a problemas relacionados con su salud mental. En este contexto de crisis, Fitzgerald se mudó a Hollywood en busca de trabajo como guionista. Aunque logró cierto éxito en la industria del cine, nunca se sintió plenamente satisfecho con esta carrera y continuó luchando contra el alcoholismo y la falta de reconocimiento literario.
La vida de Fitzgerald se apagó el 21 de diciembre de 1940 a los 44 años en Los Ángeles, California. Su legado, sin embargo, perduró. The Great Gatsby fue redescubierta en las décadas de 1950 y 1960, convirtiéndose en un clásico de la literatura estadounidense y uno de los libros más estudiados en las aulas. A través de sus obras, Fitzgerald capturó la esencia de una era y planteó preguntas perdurables sobre la búsqueda de la identidad, el amor, la ambición y el desengaño.
Hoy en día, F. Scott Fitzgerald es recordado no solo por su prosa lírica y su aguda observación de la naturaleza humana, sino también por su influencia en la literatura moderna y su representación de un tiempo que resonará en la cultura estadounidense durante muchos años más.