Tao Te King

Lao Tsé no fundó ninguna escuela. No sintió el deseo ni la necesidad de hacerlo, porque no tenía la intención de difundir una doctrina. Vislumbró las grandes conexiones universales, y vertió dificultosamente lo visto en palabras, dejando a otros espíritus afines de épocas posteriores la tarea de seguir sus indicaciones y de contemplar por sí mismo el conjunto del mundo y las verdades que él descubrió. Lo cierto es que en todos los tiempos han existido pensadores capaces de elevar su visión por encima de los fenómenos pasajeros de la vida humana hacia el eterno sentido del...