El silencio de Dios y otras metáforas
En el año 2002 Alfonso Armada era corresponsal del diario ABC en Nueva York y Gonzalo Sánchez-Terán trabajaba como cooperante en los campos de refugiados de África Occidental. A propuesta de la revista XL Semanal iniciaron una correspondencia que se prolongaría durante treinta meses. En cartas llenas de hechos, gritos y poesía, Armada describe los latidos de una ciudad que aún se restañaba la herida abierta del 11-S mientras Estados Unidos invadía Irak y reelegía al presidente Bush, y Sánchez-Terán consigna, desde la extrema miseria de las aldeas de Guinea Conakry, el final de la...