Memoria del Segundo Foro Interamericano sobre Espiritualidad Indígena
Hace 500 años ocurrió un desencuentro entre los pueblos europeos y los de América. Hoy en día, lo que pretendemos es crear espacios de verdadero encuentro entre ellos. Y ello pasa obligatoriamente por la reconciliación, vale decir el reconocer los errores propios, solicitar el perdón y reparar las faltas. Estamos condenados a entendernos o a degenerar todos juntos. El mundo occidental agoniza por su carencia de sacralidad, su alejamiento de la naturaleza, su pretensión a la omnipotencia y su mortífero materialismo. Se olvidó cosas tan evidentes y sencillas como que tiene la tierra...