El último día antes de mañana
«623 gramos. Devuelvo las cenizas a la urna. La cierro y respiro hondo. Calculo. 2 quilos y 760 gramos menos que al nacer. Con los ojos abiertos enseguida. Muy abiertos. Una mirada lo bastante conmovedora para que se me hiciera un nudo en la garganta.» Tras la muerte de su hija, el narrador de El último día antes de mañana reconstruye su propia historia. En medio del naufragio emocional y el hundimiento de todas las certezas, recompone su pasado, desde la niñez bajo la influencia de una madre inestable y con el telón de fondo de los abusos y la represión de la educación religiosa, al ...