Gógol en el Palacio de El Pardo

Una cena elegante per dieci persone, a Londra, oggi. Ricchezza, fama, nobiltà mescolate. Si parla di furti in case di amici. Un attraente cameriere serve i vini. Mentre tutto questo succede, si stringono i fili di un piano efferato, che finirà nel sangue. Altra scena: in un grande magazzino una giovane dai capelli rossi, con l’aria innocente e fuori dal mondo, sceglie pensosamente qualche pompelmo. Che cosa unisce queste due scene? La presenza del Male allo stato puro. Un male che non dispone soltanto di un Angelo sterminatore ammirato e corteggiato da tutti, ma di una mente occulta che,...

Série Sebastian Bergman 5 milhões de exemplares vendidos A série policial nórdica de maior sucesso internacional Três assassinatos em poucos dias. A tranquila cidade sueca de Karlshamn é tomada pelo terror. Vanja e os seus colegas estão sob pressão para parar o atirador antes que ele mate mais pessoas. Mas não há pistas nem testemunhas nem ligações claras entre as vítimas. Três anos após os acontecimentos que vivenciaram em Mentiras consentidas, Vanja, Torkel, Ursula, Billy e o resto da equipa da Unidade de Homicídios de Estocolmo têm lidar com um assassino em série que...

La obra de Guillén, poeta nacional de Cuba, es un canto de rebeldia y esperanza, de combate y saludo por parte de quien siempre ha conservado una poética comprometida adecuada al momento y a la materia de sus instancias raciales, nacionales y políticas.

Tiene juventud, belleza y fortuna, pero ha debido renunciar al amor. Helen, la hija de un rico comerciante, es obligada por su padre a contraer un matrimonio de conveniencia con Ashley Cadoux, el heredero del Vizconde Maynard, a quien su cojera de nacimiento ha convertido en un hombre huraño. En su nuevo hogar, Helen convive con una familia aristocrática muy distinta a la suya. Tendrá que enfrentarse a su suegro, soberbio y despótico, que ha aceptado la boda solo porque la dote de Helen le salva de la ruina, y a su cuñado Edgar, que ve en ella una amenaza a sus ambiciones. Helen soñaba...