Amor

Una joven prostituta recorre una ciudad nocturna de límites imprecisos, quizá Tel Aviv. Se hace llamar Libby, «corazón mío» en hebreo. La miran tanto los hombres como las mujeres: «No soy guapa, se acostaban conmigo», repite como en un salmo o una confesión, pero no se deja atrapar por las miradas ni por las palabras. Sube y baja de coches con chóferes lacónicos y comparte momentos de humor y sororidad con otras trabajadoras sexuales. Su vida es como un sueño que le sucede a otra persona, una suma de violencias y una forma de libertad en la que no se puede ser libre. El debut...